Cuidados a terceros y dependientes
Cuidados a terceros y dependientes
En Seclym, contamos con una prestación para todo el personal que forma parte de esta gran familia.
En caso de tener un dependiente o tercero que requiera de cuidados especiales, Seclym, cubrirá la capacitación del familiar o persona que designes en cuidados especiales.
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9 Cuidados básicos para personas dependientes
que debes tener en cuenta
Cuidar a personas dependientes es una labor que requiere mucha resistencia física y mental, paciencia, vocación, entre otras cualidades que precisa quien vaya a dedicarse a ésta encomiable tarea humanitaria, porque en el desempeño de éste tipo de actividad se dan momentos de gran tensión y dureza, frente a otros en los que se recibe un alto grado de gratificación personal.
Entre las personas dependientes existen aquellas que siempre lo han sido, por problemas congénitos desde su nacimiento, o tras sufrir un accidente, o enfermedad invalidante, pero existe un alto porcentaje de personas que tras manejarse con autonomía durante toda su vida, comienzan a perder progresivamente sus facultades como consecuencia del deterioro físico y mental producido por el proceso de envejecimiento de su organismo, requiriendo de servicios asistenciales.
En cualquier caso hablamos de personas dependientes cuando se trata de quienes no pueden realizar de forma personal y autónoma acciones básicas cotidianas, como puede ser atender su propia higiene personal, las tareas domésticas necesitando ayuda en el hogar, ocuparse de adquirir sus alimentos y cocinarlos, o atender sus obligaciones administrativas y sociales sin la ayuda de otras personas, por pérdida de capacidades físicas o psíquicas. En estos casos, Cuidania ayuda a las familias a contratar la cuidadora idónea para la ayuda a domicilio de su familiar.
¿Qué debemos tener en cuenta al cuidar a personas dependientes?
Dentro del concepto de ayuda a la dependencia, existen diferentes grados, que dan lugar a múltiples circunstancias o formas de dependencia, que incluso pueden variar por días, o incluso por horas, por lo que la ayuda siempre se debe adaptar al grado de necesidad en cada momento.
1. En función del grado de dependencia, hay que permitir y ALENTAR EN LO POSIBLE LA PROPIA AUTONOMÍA, aunque necesite una supervisión y ayuda a la hora de concluir cada actividad, con el objetivo de generar motivación en el dependiente, y evitar que la dejadez y apatía vaya en aumento. El estado físico y el ánimo de las personas dependientes varía constantemente, por lo que existen momentos en los que se encuentran más activos o presentan una pasividad total.
El cuidador debe saber adaptarse a la situación en cuanto a su ayuda de dependencia, siempre bajo el principio de vigilar y estar pendiente para garantizarse la seguridad de esa persona, pero dejándole suficiente libertad de acción para evitar la frustración. De ésta manera nos podemos encontrar con una persona con discapacidad psíquica pero con movilidad, que unos días colabora o realiza en mayor o menor medida parte de su aseo diario, mientras otros días lo evita, y no ayuda. Un parapléjico puede tener momentos de vitalidad en los que desea realizar algún tipo de acción, colaborando en el cuidado personal, aceptando su alimentación o con actividades como leer pasando las hojas, o realizar cualquier actividad adaptada a su estado, mientras otros días mantiene una pasividad total.
2. Un punto fundamental que hay que tener muy presente es que las personas dependientes han perdido o no disponen de su autonomía física, o psíquica, por lo que necesitan unos cuidados básicos que no pueden realizarse a sí mismas de forma personal, pero esto no es todo, porque no se puede obviar una parte fundamental del ser humano, y que es tan imprescindible como el cuidado físico, nos referimos al componente emocional como parte integrante dentro del SERVICIO DE AYUDA. Entre los cuidados más importantes, están el afecto, y placeres sensoriales como la música, imágenes, contacto físico mediante abrazos, atención, tono de la voz siempre afable y suave, y un ánimo positivo y alegre por parte de las personas que cuiden a personas mayores y otro tipo de dependientes.
3. LA COMUNICACIÓN es uno de los puntos más importantes que requieren una enorme dosis de energía por parte del cuidador profesional de personas dependientes, frente al fuerte desgaste que en muchas ocasiones produce éste tipo de actividad. Siempre hay que mantener la paciencia, repetir una y otra vez la información, y aprender a aceptar que nos repitan una y otra vez lo mismo, sin perder la calma.
Cuando se producen situaciones de bloqueo, o incluso de agresividad consciente o inconsciente, durante el servicio de cuidado de ancianos o enfermos dependientes, los cuidadores deben tirar de su ingenio para romper la situación paralizante, y cambiar el escenario mental de la persona dependiente, de tal manera que se pueda avanzar sin agresividad ni situaciones de fuerza. En éste sentido es muy importante averiguar qué cosas les pueden gustar a los mayores o enfermos, para desarrollar actividades lúdicas y positivas que tranquilicen a ambos, y reestablezcan un canal de conexión entre cuidadores y cuidados.
La agresividad y la rebeldía es un comportamiento implícito en la esencia humana, y por tanto también se presenta incluso con mayor frecuencia en las personas dependientes, por lo que los cuidadores deben estar preparados para éstas situaciones, aislándose en el plano personal, pero actuando de forma responsable frente a las circunstancias con aplomo, y nunca castigando porque solo conseguirás efectos negativos.
4. LA HIGIENE PERSONAL es otro de los puntos más delicados, incluso aunque la persona sufra un importante deterioro cognitivo, porque de algún modo en muchas ocasiones presentan reacciones frente a la sensación de invasión de su intimidad. Por esta razón el servicio de cuidado de ancianos y dependientes debe ser prudente y respetuoso, preservando la dignidad de quién está a su cuidado, prestando una ayuda discreta siempre en un entorno de intimidad.
5. LA INCONTINENCIA, es otro punto muy estresante tanto para cuidadores como cuidados, por eso en éstas situaciones los cuidadores se pueden encontrar con la negativa de aceptar el uso de pañales o accesorios absorbentes por parte de las personas cuidadas. En estas situaciones es fundamental que el cuidador profesional personas dependientes, mantenga la calma, tanto cuando hay que convencer ante una negativa, como cuando tras poner el pañal te encuentras con el desastre, porque la persona se lo ha quitado. Si la persona presenta posibilidades cognitivas, hay que tratar de explicar la importancia de usar pañal, tantas veces como sea necesario, siempre desde el respeto, y el sosiego. Actualmente existe ropa interior absorbente que ayuda a percibir su empleo con mayor tolerancia por parte de las personas mayores y otros dependientes, evitando un gran porcentaje de rechazo, siendo muy cómoda también a la hora de retirar y sustituir en personas con movilidad. El uso de toallitas húmedas también ayuda mucho a la hora de solucionar éste tipo de situaciones.
6. LA ALIMENTACIÓN. es otro de los pilares básicos en el cuidado de personas dependientes, por lo que siempre partiendo de la dieta aconsejada por el médico de cabecera, dependiendo del estado general de salud: baja en sal, azúcar, astringente, o para favorecer el tránsito intestinal, et, hay que tratar de variar lo máximo que se pueda las formas de preparación, y sabores para evitar rechazo y mantener nutrida e hidratada a la persona lo mejor posible. Mientras que las personas mantienen un grado de dependencia bajo, se les debe permitir realizar todas las actividades que realmente sean capaces de hacer, siempre bajo una supervisión discreta que garantice su seguridad. Cuando la persona dependiente se encuentra en un estadio avanzado de enfermedad terminal o de pérdida de la consciencia, puede llegar a olvidar el hábito de tragar, siendo necesario el uso de espesantes en la preparación de papillas y purés, requiriendo finalmente alimentación asistida por parte del técnico en atención a personas dependientes.
7. MEDICACIÓN Y REVISIONES MÉDICAS, es otra de las cuestiones que se deben cuidar especialmente, recurriendo a las visitas médicas siempre que resulte necesario, y llevando un estricto control de las dosis y horarios para la administración de medicamentos a personas dependientes. En el caso de personas con autonomía motora y deterioro psíquico es muy importante custodiar la medicación y otros productos que pueden poner en peligro su seguridad por ingestión accidental.
8. LA ESTILMULACIÓN es otro elemento que cualquier cuidador debe tener en cuenta al tratar con personas dependientes, programando salidas para tomar el aire y el sol, y poder disfrutar en mayor o menor grado de entornos diferentes, promoviendo la distracción y los recuerdos agradables, en los que la discreción es una máxima fundamental para preservar la seguridad y dignidad de la persona dependiente en las relaciones generadas con terceros fuera de casa, en que el cuidador debe explicar pero siempre sin excederse en la información que da.
9. Dependiendo del tipo de dependencia, pueden ser necesario ACONDICIONAR LA VIVIENDA con una serie de medidas de seguridad, para evitar accidentes, tales como cámara de vigilancia remota, barandillas laterales para la cama, o cierres de seguridad en ventanas de pisos altos, adaptadores para duchas, andadores, sillas de ruedas, etc.
Cuando el cuidado de un dependiente, que prácticamente requiere de una dedicación continua, recae en gran parte sobre los familiares, éstos pueden y deben solicitar ayuda para la dependencia en el hogar previstas por los organismos públicos y/o recurrir a una Agencia de Servicio Doméstico y Cuidadores como Cuidania que le oriente y gestione la selección de una cuidadora ideal ya sea interna o externa para el cuidado del familiar dependiente en el hogar. En todo caso, la ayuda a la dependencia, dependerá del grado de dependencia y nivel económico de la persona.
Por ello es importante contar de alguna forma con la ayuda de profesionales expertos en el cuidado de personas dependientes como Cuidania, para poder disponer de tiempo personal, y cuidarse a sí mismos.
Si necesitas atención para algún familiar, CONCTACTA con el Departamento de Recursos Humanos para contar con la capacitación de servicios adecuados y garantías, en el cuidado y asistencia domiciliaria a personas dependientes.